Volvo se fundó en 1927 y, desde entonces, la seguridad viene siendo nuestro faro. Hoy, más de 90 años después, seguimos marcando el camino con una amplísima variedad de innovaciones pioneras en cuanto a seguridad que se están abriendo paso en el sector de la automoción. Y nuestra visión es clara: cero accidentes con productos del Grupo Volvo.
Para nosotros, la seguridad no consiste únicamente en desarrollar innovadoras soluciones en nuestros productos. Tenemos además una responsabilidad social y una importante función que desempeñar en aras de conseguir un tráfico por carretera más seguro. Y sabemos que podemos marcar la diferencia. El Grupo Volvo es una de las empresas más importantes del mundo en cuanto a investigación en seguridad para vehículos comerciales. Y además, forzamos los límites en lo referente a estándares de seguridad, estableciendo unos requisitos más estrictos si cabe que los que exige el mercado.
Volvo goza de la mejor reputación del sector en cuanto a innovaciones en materia de seguridad. Introdujimos el sistema de frenado ABS, la dirección asistida y los frenos de aire comprimido. Y seguimos trabajando. Mejoramos continuamente en nuestro camino hacia la consecución de cero accidentes.
La seguridad constituye una de las piedras angulares de nuestro legado y de nuestra estrategia para el futuro, y nos acerca cada vez más y de manera inexorable a nuestro objetivo de cero accidentes.
Somos muy conscientes de que nuestros autobuses, por muy seguros que sean, no pueden prevenir por sí solos todos los accidentes. Los accidentes ocurren, a pesar de todo: por errores humanos y por el entorno en el que los autobuses circulen. De producirse, nuestra labor es minimizar las consecuencias para conductores, pasajeros y otros usuarios de la vía. He aquí tres sistemas de protección que reducen significativamente el riesgo de lesiones graves en colisiones con coches de pasajeros.